CAMPEONES DE INVIERNO

El Barça hunde a un Sevilla incapaz, que no ha ofrecido resistencia. Con este resultado, los de Guardiola ya sacan cinco puntos al Madrid y se proclaman campeones de invierno. Además, si no pierde en Valladolid completará invicto la primera vuelta de la Liga por primera vez en su historia.

El Barça se ha quedado un poco más solo al frente de la clasificación tras derrotar con más suficiencia aún de lo que indica el amplio marcador al Sevilla (4-0), lo que le ha valido el campeonato de invierno tras la derrota del Real Madrid en San Mamés. Los azulgrana, a una jornada para el final de la primera vuelta del campeonato, disponen ahora de una ventaja de cinco puntos sobre el segundo clasificado, y se garantizan el título honorífico de campeones de invierno.

Pese a la goleada, al Barça le costó abrir el partido. De hecho, el 1-0 llegó con un gol en propia puerta de Escudé en los primeros minutos del segundo tiempo, después Pedro, que acababa de salir al terreno de juego puso la tranquilidad en el tanteador (m.70) y Messi rubricó la goleada con dos tantos en los minutos finales.

Los bajitos ponen el fútbol

Iluminados por Andrés Iniesta y Xavi Hernández, el fútbol del Barça fluyó desde el primer minuto y si no marcó antes fue, simplemente, porque Zlatan Ibrahimovic no acertó en la primera oportunidad que tuvo, una ocasión con el meta batido y a dos metros de la línea de gol en el minuto 6. No le costaba al equipo de Guardiola llegar a los aledaños de la meta Palop, aunque otra cosa diferente era materializar sus ocasiones que, aunque no fueron demasiadas en el primer tiempo, sí suficientes como para haberse adelantado antes de que lo hiciera.

Se desmelenó el Barça en la reanudación y lo que parecía inevitable: marcar un gol, lo consiguió de la manera más impensable. Y es que Palop hasta entonces lo paró todo, menos un remate de un compañero. Una jugada de Márquez, un remate de Piqué fue desviado por el central sevillista que sorprendió a su meta en el minuto 49, a partir del 1-0, los barcelonistas se sintieron aún más cómodos y pudieron decidir el partido en los siguientes minutos.

A partir de entonces, los catalanes jugaron todavía mejor. El cambio de Pedro por Henry acabó por finiquitar el partido. El canario aprovechó una magnífica asistencia de Xavi para marcar el 2-0, hasta Messi, que no estuvo acertado hasta entonces, encontró el camino del gol y marcó dos más, para convertirse en el máximo goleador del campeonato con 14 dianas.