Arsène Wenger no se resigna a perder a su estrella y ha pedido a sus dirigentes que hagan un esfuerzo económico para retener al crack
Al Arsenal no le ha quedado más remedio que mover ficha. El club londinense, consciente del deseo de su gran estrella, Cesc Fàbregas, de regresar a casa y fichar por el Barça, ha decidido dar un paso al frente. En un intento a la desesperada por frenar la marcha de su capitán, presentará en los próximos días una importante oferta de ampliación y mejora de contrato encaminada a retener al buque insignia de su actual plantilla. Un esfuerzo tan reseñable como inútil.
El Arsenal quiere apurar sus opciones y parece dispuesto a plantar batalla. Para empezar, ha movido hilos a través de la prensa inglesa. Varios rotativos británicos adelantaban ayer los grandes números que regirán la propuesta elaborada por el club londinense. Cifras y cantidades que situarían a Cesc entre la elite del fútbol mundial. Según las informaciones aparecidas, en el hipotético caso que el futbolista catalán aceptara la oferta, pasaría a ingresar alrededor de 34 millones de euros netos durante las próximas cinco temporadas. Pero no será posible. Y es que la voluntad de Cesc por recalar en el Camp Nou va mucho más allá de las cuestiones estrictamente económicas.
El centrocampista no tiene la más mínima intención de ampliar su compromiso con el Arsenal. El jugador tiene tres años más de contrato con la entidad ‘gunner’ y su único propósito es aguardar paciente a que los dirigentes de su club y la directiva del Barça cierren un traspaso amistoso que le permita vestirse de azulgrana la próxima temporada y abandonar el Emirates con la cabeza bien alta y con el apoyo y cariño de la que ha sido su afición durante las últimas temporadas. Todo debe hacerse de forma amistosa y con el beneplácito final de las partes implicadas.
El Arsenal se mueve pero sabe que la respuesta a los deseos será negativa. Sólo es cuestión de tiempo y saber hasta dónde podrá exprimir en sus exigencias económicas. El guión del futuro está diseñado y en él se han escrito los dos primeros capítulos. De entrada, Cesc ya ha transmitido su deseo de regresar al Barcelona a final de temporada. Acto seguido, el club azulgrana ha apuntado un dato crucial. Su intención para cerrar el traspaso es poner sobre la mesa unos 50 millones de euros. Un montante más que respetable y que se espera pueda colmar las apetencias de un Arsenal que no pondrá nada fácil la marcha de su estrella.
Con más o menos reticencias, el dispositivo sigue su curso procurando no herir las susceptibilidades de nadie. La temporada se encuentra en pleno apogeo y no se trata de desestabilizar a vestuarios como el azulgrana o el del propio Arsenal. Las declaraciones públicas son contadas, pero al mismo tiempo contundentes. El Barça ha confirmado su deseo y hace apenas unos días, Cesc, con suma cautela, repetía que quiere volver al Camp Nou.
No hay comentarios:
Publicar un comentario